“El esfuerzo conjunto de todos los sanitarios para conseguir no solo tratar adecuadamente las dolencias, sino prevenirlas, es el gran objetivo y el mejor horizonte que puede ofrecerse a los ciudadanos”.
José María Segovia de Arana (1919-2016)
El
pasado día 4 de enero, a los 96 años de edad, fallecía en Madrid el Dr. José María Segovia de Arana, una figura emblemática en la medicina española,
promotor de la formación de médicos especialistas a través del sistema MIR, y gran
referente sin cuya esencial y decisiva aportación no
podría entenderse el actual Sistema Nacional de Salud.
Nacido
en 1919 en la localidad toledana de Villasequilla, su discurso de ingreso en la
Real Academia de Medicina, en marzo de 1998, titulado Medicina, sanidad, salud explica muy bien su concepción de la moderna asistencia
sanitaria colectiva y lleva a cabo un detallado análisis y estudio de los
problemas y desafíos a los que ya entonces se enfrentaban los sistemas sanitarios
occidentales…
Tuve ocasión
de oírle por última vez en el Colegio de Médicos de Madrid en febrero de 2013, en
las I Jornadas Nacional de Gestión Sanitaria, en
las que pronunció unas hermosas palabras en defensa del sistema sanitario
público.
Ayer
mismo, el Dr. José Luis Conde Olasagasti, considerando que su figura y
sobre todo la historia merecen algo más de atención que la que ha recibido en
los medios, me hace llegar
una breve semblanza de este ilustre paisano que ha redactado con motivo
de su fallecimiento, y que intentó (sin éxito) publicar en el diario El País, (donde
por cierto publicaron una necrológica escrita por Federico Mayor Zaragoza).
En cualquier caso, como muestra de gratitud y reconocimiento, transcribo dicha nota a
continuación:
JOSE MARIA SEGOVIA DE ARANA: PADRE Y RESPONSABLE DE LA MODERNA SANIDAD ESPAÑOLA
«José María Segovia de
Arana nos ha dejado, tras una vida tan larga como fecunda. Es difícil describir,
siquiera sucintamente, el impacto de su quehacer en la génesis y desarrollo del
Sistema de Salud. Su historia no se entiende sin José María Segovia.
En tiempos de zozobra,
incertidumbre y voluntades reformistas hay una certeza aceptada con rara unanimidad:
tenemos un excelente SNS que se compara con éxito con cualquiera de los mejores del mundo. A
diferencia de lo que sucede en otros ámbitos no pide grandes reformas
“estructurales”.
Este logro no fue un
fruto obligado e inevitable del desarrollo
económico, político y social. El desarrollo ayudó, pero las cosas
podrían haber sido de otra manera y no lo fueron por la audacia, clarividencia
y entrega de unos cuantos a los que el
Dr. Segovia lideró.
Algunos hitos propiciados por él modelaron y condicionaron el futuro.
En 1964 una pequeña
clínica privada (no estrenada) de los dominicos (la Clínica Puerta de Hierro)
era vendida a la Seguridad Social que, no sabiendo muy bien qué hacer con ella,
la encomendó a dos médicos visionarios (J.M. Segovia y D. Figuera), que
aceptaron el encargo con algunas condiciones que incluían: dedicación plena y
exclusiva, estructura jerarquizada y especializada de servicios médicos,
libertad para la contratación de personal (ajena a la entonces imperante), ambición
investigadora y presencia de unos postgraduados llamados internos y residentes
similares a los que existían en algunos hospitales españoles y extranjeros. El
sistema (modelo Puerta de Hierro) tuvo éxito inmediato y fue exportado a otros
grandes centros que se estaban abriendo.
En los 70’s y tras
aceptarse, (no siempre sin resistencia), que el éxito del cambio radicaba en la
formación práctica supervisada y remunerada de los médicos recién graduados, se
institucionaliza y consolida el sistema MIR y los requerimientos para la
formación de especialistas. Todo ello cristaliza en normas propiciadas por J.M.
Segovia a finales de esa década, siendo el primer presidente del Consejo de
Especialidades Médicas y Secretario de Estado para la Sanidad.
Siendo médico de cualificación
y perfil hospitalario, entendió antes y mejor que muchos que una atención
sanitaria integral no era posible sin una potente medicina primaria, y se
convierte en promotor decidido de la Medicina Familiar y Comunitaria, creando la
especialidad (1978) y construyendo el primer centro de salud con acreditación
docente.
En otro extremo
tecnológico y un año después (1979), promueve y consigue que se apruebe la
modélica Ley de extracción y Trasplante de Órganos.
Si ha habido un
protagonista con visión estratégica y
audacia gestora en el escenario
sanitario español del siglo XX ése ha sido sin duda el Profesor José María
Segovia de Arana.
Descanse en paz y
eterna vida en nuestra memoria agradecida.» En Toledo a 4/01/2016
José Luis Conde Olasagasti (Ex MIR de
la Clínica Puerta de Hierro)